¡Herman@!

Es tiempo que nos enfoquemos en una poderosa preparación espiritual, que nos permita vencer y ganar almas para Cristo. Te invito a que seas parte de este ejército ¡y que avives el fuego del don de Dios que está en ti!

martes, 15 de junio de 2010

El amor de Dios


Jesús es lo máximo y ésta es la única palabra que puedo utilizar para más o menos describir su grandeza y amor hacia la humanidad. En estos momentos estoy algo triste porque paso por una prueba muy fuerte que yo misma busqué para agradar a Dios, pero el Señor Jesucristo es mi fortaleza y mi paz.

Seguir a Dios y vivir conforme a lo que Él manda en este mundo es difícil, pero cuando uno recuerda el gran amor que desprende para nosotros sólo por bondad y misericordia, uno se anima a seguir adelante, cueste lo que cueste.

Dios es tan bueno, que cuando uno se arrepiente de corazón, entendemos que el sacrificio en la cruz fue por amor a nosotros y que ésta es la única vía para obtener la salvación. Jesús no tarda en interceder por nosotros y otorgarnos el perdón.

Jesús transforma vidas. Las vuelve bellas, puras, alegres y llenas de bendición. A medida que me he acercado a Él, me he dado cuenta de aquello... pero hay que sacrificarse y aunque uno llore y muchas veces desee dejarlo todo, hay algo en nuestro espíritu que nos impide volver atrás.

Sin embargo, a pesar de que en lo personal he sufrido y llorado bastante, jamás he querido abandonar a mi Señor... porque es MUY BUENO y aunque uno se vea un perdedor porque todavía no alcanza la madurez espiritual, Él sigue a nuestro lado escuchándonos sin que lo merezcamos.

Hay veces cuando oro que lloro porque no comprendo por qué Dios nos quiere tanto... y le digo al Señor ¿por qué tanto amor?, ¿por qué nos quieres tanto si somos tan malos y pecadores?, ¿cómo es posible que sigas amando a quiénes te ofenden y odian?... y luego me doy cuenta que Dios no es como los hombres, que su amor envuelve todo y embellece hasta los rincones más horribles del planeta.

Si no conoces al Señor y sientes que tu carga es pesada y que nada de este mundo te consuela, no dudes en acercarte a Él. TE PROMETO que tu vida irá mejor y cambiará para bien. Jesús perdona hasta al pecador más sucio... perdona al ladrón, a la prostituta, al drogadicto, al pedófilo, al violador, al mentiroso, al vanidoso, al avaro, al psicópata, al brujo/a, al espiritista, al que tiene odio, al homicida, al envidioso... ¡¡¡A TODOS!!! sólo porque Él es grande y majestuoso y su amor alcanza hasta el más miserable.

Yo no soy nadie para que Dios me haya mirado y querido, pero su bondad y amor fue tal, que alcanzó hasta mí y me sanó. Hoy soy feliz, vivo caminando de la mano de Jesús y su ángel me protege día y noche. ¿No es maravilloso todo eso?... a medida que pasa el tiempo y lo bien que se porte uno, más serán las bendiciones que Dios traerá a nuestras vidas.

No tardes tu decisión y humíllate, Dios te oirá y será contigo si es que lo haces de corazón.

Amén y ¡prosigamos al blanco!

1 comentario:

  1. Amen, por favor oren por mi, gracias por todo, que este ministerio siga adelante

    ResponderEliminar